Siempre tenemos que protegernos de las radiaciones, y hay diferentes maneras de hacerlo. Las radiaciones ultravioleta del sol se pueden combatir utilizando prendas de vestir adecuadas, con sombreros, y sobre todo, aplicando adecuadamente cremas de protección solar sobre la piel.
PARA PROTEGER LOS OJOS CUANDO NOS EXPONEMOS AL SOL, ES NECESARIO UTILIZAR GAFAS CON CRISTALES QUE ABSORBAN LA RADIACIÓN ULTRAVIOLETA.
Cuando no se disponga de otros medios de protección, es aconsejable utilizar cremas de protección solar de amplio espectro (UVB y UVA), y reducir el tiempo de exposición al sol, en lugar de alargarlo. La aplicación tópica de las cremas de protección solar es la más utilizada para absorber los rayos UVB, pero algunos productos no absorben eficazmente las radiaciones UVA, de longitud de onda más larga. Si se utiliza una crema de protección solar, conviene escoger un factor de protección elevado, y ser consciente de que se utiliza para protegerse del sol, y no para broncearse.
La propiedades reflectoras de la superficie del suelo inciden en la exposición UV. La hierba, la tierra y el agua reflejan menos de un 10% de la radiación UV incidente. No obstante, la nieve fresca refleja casi un 80%, y la arena entre un 10% y un 25%, lo que indica que la exposición de los bañistas y los esquiadores a los rayos UV es más intensa.